La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó el lunes provisoriamente la plena implementación del decreto anti-inmigración del presidente Donald Trump, a la espera del examen sustantivo de esta medida que bloquea la llegada de ciudadanos de seis países, en su mayoría musulmanes.
El máximo órgano de justicia estadounidense suspendió la decisión tomada en octubre por un tribunal inferior, que había bloqueado la implementación de la prohibición de ingreso de ciudadanos de Chad, Siria, Yemen, Irán, Somalia y Libia, en tanto su impugnación se resuelve en un tribunal federal de apelaciones.